La investigación confirmó al menos cuatro hechos de abuso cometidos entre 2013 y 2021 por el hombre de 56 años, quien fue capturado en la mencionada localidad matancera.
El hecho se desencadenó cuando una joven de 19 años relató los abusos sufridos durante su infancia y adolescencia por parte de su profesor de Taekwondo.
Luego de que la víctima ratificara su denuncia y se reunieran pruebas y testimonios que confirmaron un patrón de conducta reiterado y sistemático, se emitió la orden de arresto y fue capturado por efectivos de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) La Matanza.
Este jueves, en un departamento en la calle Los Andes al 1900, en la localidad de Isidro Casanova, se produjo la detención del hombre de 56 años, acusado de abuso sexual gravemente ultrajante en calidad de encargado de la educación, con al menos cuatro hechos comprobados.
La orden de detención fue otorgada por el Juzgado de Garantías N° 6, a cargo de la Dra. Karina Andrijasevich, y la causa está bajo la órbita de la UFIYJ N° 4, especializada en Violencia Familiar, Género y Delitos contra la Integridad Sexual, a cargo de Roxana Castelli.
Fuentes policiales confirmaron que el caso comenzó a gestarse cuando la víctima, decidió romper el silencio y denunciar los hechos en 2023, tras años de padecimientos.
La joven relató que los abusos comenzaron cuando tenía 7 años y se extendieron hasta los 13, durante el período en que asistía a clases de Taekwondo en el club Deportivo Paraguayo, ubicado en la localidad de González Catán.
Según su testimonio, el profesor aprovechaba los momentos de práctica para realizar tocamientos en sus partes íntimas, tanto por encima como por debajo de la ropa.
La denuncia detalla que los abusos no solo persistieron, sino que se agravaron con el tiempo, recurriendo a amenazas explícitas para garantizar el silencio de la menor, mordidas y besos.
En 2019, la víctima pidió a su familia dejar de asistir al club, esgrimiendo distintos motivos para evitar el contacto con el agresor.
La investigación, coordinada por el Gabinete de Delitos contra la Integridad Sexual de la DDI, se activó a partir de la denuncia formal y la ratificación de los hechos por parte de la víctima en 2025.
Los detectives, convocados por el Ministerio Público Fiscal, recopilaron testimonios y elaboraron informes psicológicos que permitieron trazar el perfil del imputado y de las víctimas.
Durante el proceso, surgieron testimonios de otras tres víctimas, todas menores de edad al momento de los hechos, una de ellas sobrina del acusado, quienes describieron abusos bajo el mismo modus operandi.
La acumulación de pruebas y la intervención de organismos especializados en violencia de género y delitos contra la integridad sexual resultaron determinantes para solicitar medidas de coerción.
El Juzgado de Garantías interviniente otorgó la orden de detención inmediata, que se ejecutó tras una vigilancia encubierta en el domicilio donde el acusado se había ocultado.
Tras su detención, el acusado fue trasladado a una sede judicial para la audiencia prevista y las diligencias legales correspondientes, bajo la supervisión del comisario mayor Flavio Andrés Marino, director de la DDI La Matanza.
