El Centro de Medicina Física y Rehabilitación (CEMEFIR) se encuentra nuevamente en peligro, ante un posible remate judicial del inmueble y el sucesivo cierre de la institución.

Por Giuliana Caivano

El Centro de Medicina Física y Rehabilitación (CEMEFIR) nuevamente se encuentra en peligro, ante el posible remate judicial del inmueble seguido del cierre de la institución local, fundada en el año 1956 y que en 1964 se ubicó en la calle Perú 2433, entre Arieta y Almafuerte, donde funciona hasta la actualidad brindando atención gratuita a personas con distintas discapacidades, y que tiene como objetivo principal la rehabilitación psicomotriz de las mismas.

De este modo, trabajadores de CEMEFIR, profesionales de la salud, pacientes y familiares, convocaron un abrazo simbólico para este viernes desde las 10 horas en la sede ubicada en la localidad de San Justo, frente al posible remate judicial del inmueble, junto con el cierre de la institución.

Al respecto, dialogamos con el dirigente matancero de la Unión Cívica Radical, Gustavo Barresi, quien aseguró que desde su espacio acompañarán la movilización que se realizará en el distrito.

Barresi apuntó a que muchos de los problemas que se fueron gestando en CEMEFIR, tuvieron que ver con las disposiciones que tomaron las comisiones directivas.

“Lamentablemente si bien la medicina física y la rehabilitación era el fundamento del lugar, la comisión directiva lo único que hizo fue armar un call center y empezar a armar cheques voladores. Hoy en día, la institución tiene una deuda que asciende a 400.000 mil dólares, pero el inmueble que está ubicado en pleno centro de San Justo podría estar evaluado en más de 4 millones de dólares”, explicó.

“Con ese dato, quiero decir, que tiene que ver primero con la desidia del Municipio, la falta de política pública por desentenderse de la salud pública y de las necesidades, no solamente de los vecinos matanceros, sino también de los vecinos aledaños que recurren al lugar para rehabilitarse”, apuntó.

El dirigente radical recordó que en el año 2013 en reuniones llevadas a cabo en el Honorable Concejo Deliberante se mencionaba que el Municipio era quien debía hacerse cargo de la deuda, sin embargo, Barresi agregó que jamás se concretó.

“El expediente siguió caminando, no se interpeló ni tampoco hubo ninguna propuesta para tratar de que este tema no vaya a mayores. Pero como las partes autoras siguieron actuando, la jueza resolvió el remate de la institución”, agregó.

Asimismo, mencionó que posteriormente en 2017 CEMEFIR estaba al borde del desalojo, por tal motivo, desde la Corriente Convicción y Lucha UCR, se presentaron en la Honorable Cámara de Diputados de la Provincia y junto con la diputada del partido Liliana Denot, y consiguieron suspender el remate por 120 días más.

En el año 2015 se declaró el remate de la propiedad en donde funciona la institución. No obstante, en 2021 se efectivizó la expropiación de CEMEFIR a través de la promulgación de la ley 15.318.

En cuanto a la deuda de la institución, Barresi apuntó que la generó la comisión directiva, que no fue tomada por CEMEFIR: “Porque desde la comisión hipotecaron el inmueble gracias a las facultades de administrar, de exponer el edificio, y la Justicia apeló porque nadie interpeló, ni tampoco se hizo frente a la deuda, el Municipio jamás lo hizo”.

Haciendo hincapié a que esta situación viene de años, Barresi expuso que: “Es la promesa del 2021, en la cual se aceptaba el pedido de expropiación del Gobierno Municipal, diciendo que iban a hacer frente a la deuda generada en aquel momento y evidentemente pasaron tres años y no solo no pasó, sino que nos encontramos con el lamentable suceso que esta entidad pueda ser rematada”.

El dirigente de la UCR aseguró que acompañarán en el abrazo que se llevará a cabo el viernes, señalando que anteriormente han estado presentes para que no se desaloje la institución, con el objetivo de que se comprenda que CEMEFIR “es beneficioso para el pueblo matancero y que, si bien uno puede llegar a criticar las medidas del Presidente (Javier Milei) actual, que no tiene en cuenta la salud, la educación, corresponde que nosotros miremos un poco hacia adentro”.

“Vamos a estar alerta de todo lo que pase y suceda. Repito, estamos hablando de 400.000 mil dólares que para el municipio no es absolutamente nada, tranquilamente se podría hacer frente a la deuda, y que tanto los pacientes como los profesionales, puedan seguir recurriendo a esta institución por mucho tiempo más”, finalizó.