La víctima es el dueño de un comercio de venta y reparación de máquinas de costura de la localidad de Gregorio de Laferrere. Lo capturaron cuando llegaba a su casa y delante de su pareja.

El vecino, dueño de un comercio de venta y reparación de máquinas de costura de la mencionada localidad.
Lo capturaron cuando llegaba a su casa y delante de su pareja. En principio, pidieron 300 mil dólares de rescate y lo tuvieron retenido en una casilla. El pago se acordó en 4.800.000 pesos, pero tardaron otros dos días en liberarlo. Las intervenciones telefónicas y las cámaras de seguridad, claves para identificar a los imputados.
Nueve personas -seis hombres y tres mujeres- fueron detenidas acusadas de conformar una banda que, simulando ser policías, secuestró el mes pasado a un comerciante de nacionalidad boliviana en el partido de La Matanza y lo mantuvo cautivo cinco días hasta que fue liberado tras el pago de un rescate de 4.800.000 pesos.
El caso fue investigado por la titular de la Fiscalía en lo Criminal y Correccional Federal N°2 de Morón, Mariela Labozzetta, y el titular de la Unidad Fiscal Especializada en Criminalidad Organizada (UFECO), Santiago Marquevich, quienes ayer le solicitaron al Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N°3 de ese distrito, actualmente subrogado por el juez federal Juan Manuel Culotta, que disponga el procesamiento con prisión preventiva para ocho de los detenidos.
Se trata de seis hombres de 22, 37, 41, 42, 48 y 56 años y dos mujeres de 54 y 55 años, una de ellas, vecina de la casa de las víctimas.
Los representantes del Ministerio Público Fiscal solicitaron que esos ocho imputados queden procesados como coautores de los delitos de “secuestro extorsivo agravado por haber logrado el fin propuesto (cobro del rescate) y por la cantidad de intervinientes, que concursa de forma ideal con el delito de robo agravado por haber sido cometido con armas de fuego -cuya aptitud para el disparo no ha sido acreditada- y en poblado y en banda; figuras que, a su vez, concursan de forma real con la tenencia ilegal de arma de guerra”.
En cambio, para la novena imputada que había sido detenida -una joven de 23 años-, las fiscalías solicitaron la falta de mérito.
El caso
De acuerdo con la investigación, el 20 de febrero pasado, alrededor de las 00:10, I.M.T. -dueño de un negocio familiar dedicada a la venta y reparación de máquinas para costura-, y su pareja L.Z.V.A., arribaron a su domicilio, ubicado en la localidad de Gregorio de Laferrere, y fueron interceptados por una camioneta Renault Sandero Stepway de color oscuro.
Según lo reconstruido por las fiscalías, tres de los tripulantes de ese vehículo, vestidos con uniformes policiales y armados, descendieron del rodado y obligaron a las víctimas a bajarse de la camioneta Renault Kangoo en la que se desplazaban, para luego conducir a I.M.T. esposado hacia el habitáculo trasero de la Sandero Stepway, diciéndole que pertenecían a “La Brigada”.
Al menos dos de los captores emprendieron la marcha a bordo del Renault Sandero Stepway en el que I.M.T. se encontraba cautivo, mientras que otro de los cómplices se subió a la camioneta Renault Kangoo de la víctima.
De esa forma, ambos vehículos, secundados por otro grupo de secuestradores que se desplazaba a bordo de un Volkswagen Gol Power de color gris topo, huyeron en dirección a la Ruta Nacional N°21 y posteriormente trasladaron al damnificado hacia un domicilio que, de acuerdo a la pesquisa está ubicado en la localidad de Monte Grande, partido de Esteban Echeverría, y donde permaneció oculto y retenido durante cinco días, hasta el 24 de febrero por la noche.
Los llamados extorsivos: “Nosotros somos la policía”
Durante el desarrollo del secuestro, los captores cursaron múltiples llamados de índole extorsivo a familiares de la víctima, mediante los cuales, en un inicio, exigieron el monto de 300 mil dólares como rescate.
“¿Querés volver a tu hermano con vida?, anda juntando plata. Necesito que juntes 300 mil dólares. Nos volveremos a comunicar. No llames a la policía porque nosotros somos la policía”, le dijo uno de los secuestradores a un hermano de la víctima activa en esa primera comunicación extorsiva, según consta en el expediente.
El pago del rescate, que se acordó en 4.800.000 pesos, se concretó en horas de la tarde del 22 de febrero último en la localidad de Gregorio de Laferrere.
A pesar de que los familiares efectuaron el pago de rescate, los secuestradores mantuvieron cautivo a I.M.T. y las llamadas extorsivas a su entorno familiar continuaron dos días más, hasta que 24 de febrero, alrededor de las 23.45, la víctima finalmente fue liberada a unos 40 metros de la avenida Cristianía del “Barrio 22 de Enero” de la localidad de Ciudad Evita.
En el dictamen presentado ante el juzgado, Labozzetta y Marquivich indicaron que el comerciante no solo fue víctima de un secuestro extorsivo que se prolongó por cinco días, sino que “en las circunstancias de tiempo, modo y lugar descritas, los autores del hecho agredieron físicamente a I.M.T. provocándole lesiones en su cuerpo y, al mismo tiempo, se apoderaron ilegítimamente de las pertenencias de éste”.
Investigación, allanamientos y detenciones
La Fiscalía Federal Nº2 de Morón y la UFECO llevaron adelante la investigación en conjunto con la la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de La Matanza de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.
A partir del análisis de las comunicaciones que mantenían los captores a través de las líneas telefónicas intervenidas con apoyo de la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (DAJUDECO), las imágenes obtenidas de cámaras de seguridad y las diversas tares de campo realizadas por esa fuerza policial, con el apoyo también de la Dirección Tecnologías Aplicadas a la Investigación en Función Judicial (DTAIFJ) de esa misma fuerza de seguridad y de la División Individualización Criminal de la Policía Federal Argentina, se pudo lograr la identificación de todos los responsables.
Como consecuencia de ello, la fiscal Labozzetta y el fiscal Marquevich formularon un pedido de allanamientos y detenciones, al cual hizo lugar el juez federal Culotta.
En virtud de ello, el 27 de febrero detectives de la DDI de La Matanza efectuaron nueve allanamientos en diversas localidades bonaerense: dos en Villa Bosch, partido de Tres de Febrero; tres en Monte Grande, partido de Esteban Echeverría; tres en González Catán y uno en Gregorio de Laferrere.
Los procedimientos culminaron con la detención de todas las personas investigadas, como así también con el secuestro de los rodados involucrados (Renault Sandero Stepway y Volkswagen Gol Power), armas de fuego de grueso calibre (una escopeta y dos pistolas calibres 9 milímetros y .45) y municiones, indumentaria policial (insignias, chalecos antibala y esposas), dinero en efectivo, y teléfonos celulares (entre ellos, uno de los utilizados para efectuar las extorsiones).
También se identificó el posible lugar de cautiverio, una casilla de madera de un domicilio de la localidad de Monte Grande, en el sur del conurbano bonaerense, que tal como describió la víctima, tenía en la entrada “un contrapiso de mampostería de cemento portland” y un suelo con un “contrapiso bruto escarpado”.