La Policía Bonaerense detuvo en las últimas horas a uno de los acusados por el ataque al colectivero de la línea 378, quien fue herido con un arma blanca durante su recorrido por Isidro Casanova.

Además, ya está identificado un segundo sospechoso por el mismo hecho, que ocurrió a fines de abril, añadieron las fuentes policiales.

Los investigadores llegaron al detenido a través de las imágenes aportadas por el Centro de Operaciones y Monitoreo (COM) del Municipio matancero.

Las cámaras de seguridad les permitieron ver que los atacantes se movían en un Chevrolet Corsa, con una patente cambiada que pertenecía a un ex empleado de la empresa. Ese auto fue secuestrado.

En las filmaciones, además, advirtieron que el agresor arrestado vestía ropa de colectivero al momento del hecho y que dejó pasar tres colectivos antes de subirse al interno.

Por estos datos, los investigadores sospechan que no se trató de un simple robo.

La agresión ocurrió en la intersección de la calle Guillermo Marconi y la Ruta Nacional N°3. Allí, el delincuente abordó la unidad y atacó al chofer con un objeto cortante.

Luego escapó a pie. La víctima sufrió cortes profundos en la cara y fue asistida de inmediato.

Días después salieron a la luz videos clave en la investigación. En ellos se logró divisar cómo los dos delincuentes llegaron a bordo del Corsa, se cambiaron de ropa en el interior del vehículo y luego le sacaron la patente al coche.

Luego, uno de ellos se fue caminando y el otro en el rodado.

Las imágenes siguieron el recorrido del sospechoso que iba a pie. Caminó hasta la Ruta 3, la cruzó e ingresó al Metrobus. “Dejó pasar tres colectivos de la empresa Almafuerte antes de subirse al interno 8″, remarcaron las fuentes del caso consultadas por este medio.

Tras el ataque, la víctima detuvo la marcha de la unidad y allí descendió el sospechoso: salió corriendo en sentido a Zinnyy abordó el Corsa donde lo esperaba su cómplice.

El caso es investigado por el fiscal Marcelo Diomede del departamento judicial de La Matanza.

Tras el ataque, un chofer contó que a su compañero, tras dejar el hospital, le esperaba una larga recuperación por delante. “Le desfiguraron la cara”, explicó.

También apuntó contra las autoridades por la falta de presencia policial: “Hace un mes nos prometieron que la policía iba a estar en la calle, estuvieron dos días y después desaparecieron”.

A raíz de lo sucedido, la empresa Almafuerte —a la que pertenece la línea 378— llevó adelante un paro total durante 24 horas en reclamo de mayor seguridad. La medida fue acompañada por todas las líneas de la compañía.

Este no fue el único ataque que sufrió un trabajador de la misma empresa en el último tiempo. El 21 de marzo, en el barrio San Javier de Virrey del Pino, otro colectivero fue apuñalado en el rostro. El agresor subió al colectivo sin decir una palabra y atacó directamente al chofer, identificado como Lucas Ibarra, de 32 años. Por la similitud, se investigó si ambos episodios estaban relacionados.