El Ministerio de Salud bonaerense informó 21 nuevas intoxicaciones por monóxido de carbono y el total de casos en la provincia de Buenos Aires llega a 300 en lo que va del año. El distrito matancero ya alcanzó los 31 reportes.

La cartera sanitaria señaló que desde principios de 2024 “se notificaron 300 casos de intoxicación/exposición por monóxido de carbono”, De ese total, “229 presentaron síntomas al momento de la consulta (casos confirmados)”, mientras que los 71 restantes no lo hicieron (casos sospechosos).

El distrito con mayor cantidad de casos es Pilar, con 46; seguido por Bahía Blanca, con 43; el municipio de La Matanza con 31; y La Plata, 29. Asimismo, también se dieron intoxicaciones José C. Paz con 9; Campana (2), San Miguel (1), Lanús (10), Almirante Brown (6), Florencio Varela (6), Avellaneda (3), Berazategui (5), Lomas de Zamora (10), Ezeiza (1), Merlo (1), Moreno (6), Hurlingham (4), General Rodríguez (8), Tandil (15), en González Chaves, con 3; San Nicolás con 1; San Martín con 2; Malvinas Argentinas, 2; General Pueyrredón (17), Olavarría (11), Rauch (5), Bolívar (1), Azul (12), General Belgrano (1), Berisso (8) y Ensenada (1).

El informe detalla que el distrito matancero marca 29 casos confirmados y 2 sospechosos, dando el total de 31 intoxicaciones.

La mayor cantidad de casos de intoxicación por monóxido de carbono se suele registrar durante los meses de temperaturas bajas y está relacionada a fuentes de calor instaladas en las viviendas.

Los principales síntomas por intoxicación por monóxido de carbono son: dolor de cabeza, mareos, somnolencia, debilidad, cansancio, náuseas/vómitos, pérdida del conocimiento y/o convulsiones, palpitaciones, dolor de pecho y hasta paro cardiorrespiratorio.

Algunas de las recomendaciones que hay que tener en cuenta para prevenir, según explicó la cartera sanitaria bonaerense son:

Apagar las fuentes de calor antes de ir a dormir.

Además, requerir la intervención de gasista matriculado para la instalación y acondicionamiento anual de calefactores, cocinas, calefones, termotanques, etc.

Controlar periódicamente tirajes de parrillas y chimeneas. Ventilar los ambientes calefaccionados. Mantener rejillas de ventilación limpias y sin obstrucciones