Una familia fue detenida en un allanamiento de urgencia realizado en la localidad de González Catán. Aprovecharon que las víctimas se habían ido para romper la medianera.
Las cuatro personas aprehendidas están imputadas por el robo: aprovecharon que su vecina se fue de la casa para hacer un boquete en la pared y desvalijarla.
Las calificaciones son por los delitos de robo agravado por efracción y tenencia ilegal de armas, ya que en el procedimiento policial se incautaron escopetas y municiones, además de las mazas que habrían usado para tirar abajo la medianera.
El escruche fue perpetrado cuando los presuntos delincuentes ingresaron a la casa vecina, ubicada en la esquina de las calles Saparelli y Puerto Argentino. Quien descubrió la escena fue el hijo de las víctimas.
Al entrar a la vivienda se encontró con todo el domicilio revuelto, varios faltantes y el evidente acceso que se inventaron los malvivientes.
Tras la denuncia, personal de la Comisaría de González Catán comenzó con las investigaciones pertinentes. Con apoyo del Grupo Táctico Operativo (GTO) de la Policía Bonaerense se llevó adelante un operativo para detener a los presuntos autores. El fiscal de la UFI N° 2 de La Matanza, Gastón Duplaa, autorizó un allanamiento de emergencia ante las evidentes pistas que dejaron los ladrones.
Los aprehendidos fueron identificados como César Estigarribia, de 46 años; sus hijos Juan Estigarribia, de 19 años; Matilde Estigarribia, de 24 años; y Jonh Ramírez Esquivel, de 26 años, novio de la joven.
Durante el allanamiento, la Policía incautó varios elementos cruciales que vinculan a los detenidos con el robo, como teléfonos celulares de las víctimas, herramientas utilizadas para realizar el boquete en la pared, una escopeta Taurus calibre 16, y una segunda marca Uzkon calibre 12, ambas con impedimento legal.
Además, se encontraron 39 municiones calibre 16 y otras 23 calibre 12, que refuerzan los cargos de tenencia ilegal de armas de guerra.
Según publicó el portal Primer Plano, los delincuentes se habrían llevado también 1.600.000 pesos que las víctimas guardaban en una habitación. La Policía habría recuperado parcialmente esa parte del botín.
También sustrajeron garrafas, una percutora y una agujereadora, según consta en la denuncia.
El fiscal Duplaá, quien interviene en la causa, ordenó que los detenidos permanezcan a disposición de la justicia y que se continúen las diligencias para el esclarecimiento completo de los hechos.
En particular, se investigará el origen de las armas de fuego y las posibles conexiones de los detenidos con otros hechos delictivos en la zona.