El senador bonaerense de UCR-Cambio Federal expresó su preocupación por el agotamiento social debido a la persistente inflación y la falta de políticas que acompañen el incremento de ingresos.
¿Qué piensa de los cinco correligionarios que cambiaron su voto y apoyaron el veto de Javier Milei a la movilidad jubilatoria?
A mí me cuesta entender que una persona, lo digo como legislador, hoy apruebe convencido un proyecto y tiempo después cambie su posicionamiento, sin que ese proyecto haya sufrido modificaciones. Lo más grave es que se trataba de una iniciativa del radicalismo. Fue un error lo de estos diputados, pero me parece que tampoco hay que sobreactuar algunas cuestiones porque sino generamos más rechazo en la sociedad.
-¿Lo dice por la decisión de la Convención Radical de suspenderlos momentáneamente?
Sí, a ver, se cumplió con toda la normativa, pero no sé si esa es la mejor decisión. Pero, bueno, no es una crítica a la decisión sino en general a la sobreactuación. También pudo haberse tomado esa decisión de manera más tranquila, sin tanto espectáculo.
-Ya que estamos hablando del ámbito nacional, ¿cómo analiza estos casi diez meses de gobierno de Milei?
Creo que ya se ha dicho mucho. El propio Presidente no tiene problemas en decir cuál es su plan de gobierno, su plan de acción, está siendo bastante consecuente con lo que está haciendo.
A mí me preocupa el tiempo que está llevando bajar la inflación. Si bien hay una desaceleración todavía estamos en niveles altos; hay aumentos de tarifas, pero no un acompañamiento con suba de ingresos. Me preocupa porque, además, empiezo a notar el cansancio de la sociedad.
Después, la verdad, yo no comparto la gran mayoría de las decisiones que fue tomando el Presidente, aunque sí creo que había que ir a un ordenamiento fiscal, pero ese ordenamiento debe tener en cuenta a los más postergados porque si no vamos a empezar a tener problemas serios en lo inmediato.