Un fuerte operativo de seguridad ordenado por la ministra Patricia Bullrich reprimió a los hinchas de distintos equipos que se concentraron frente al Congreso para acompañar a los jubilados en una nueva marcha donde reclamaron por aumentos.
Por Giuliana Caivano.
Un fuerte operativo de seguridad ordenado por la ministra Patricia Bullrich reprimió a los hinchas de distintos equipos que se concentraron frente al Congreso para acompañar a los jubilados en una nueva marcha en reclamo a las pobres jubilaciones.
El Ministerio de Seguridad de Nación confirmó 124 detenidos y 20 heridos, entre ellos un fotógrafo que se encuentra internado en estado de gravedad.
Alrededor de las 16, las fuerzas de seguridad avanzaron sobre el millar de hinchas y manifestantes que se habían reunido en la plaza frente al Congreso de la Nación y habían logrado cortar las avenidas Rivadavia e Hipólito Yrigoyen.
En respuesta, se activó el protocolo antipiquete. Reprimieron con camiones hidrantes y gases. Los hinchas respondieron con piedras y palos.
En medio de balas de goma, gas pimienta y camiones hidratantes, Gustavo “Tato” Maglio, dirigente político local, se vio afectado por la brutal represión.
El referente peronista recibió dos balas de goma: una en el pie y la otra saltó al muslo, siendo esta última la que le generó mucho dolor y por un rato le impidió mover las piernas.
Maglio expresó que en aquel momento y al observar lo que sucedía, no podían comprender porque “le disparaban a cualquiera que estaba ahí”.
“Nosotros fuimos con la intención de hacer nuestro programa, La Voz del Vecino, y nos encontramos con la policía disparando mansalva para todos lados”, detalló el dirigente.
En este sentido, Maglio relató que se encontraban en el Congreso con el objetivo de llevar a cabo su programa de radio. Sin embargo, y como la mayoría de los manifestantes, no logró escapar a la represión.
El dirigente señaló que había “mucha policía infiltrada”, que bajaban de los vehículos con camisetas de fútbol. “La policía quería que se genere lo que se generó, querían tener el argumento de reprimir. Y la represión fue muy fuerte”, apuntó.
Además se refirió al momento en el que comenzó la represión: “Estábamos haciéndole la nota a un jubilado, cuando la policía empezó a disparar a un sector donde no había nada”.
“Estábamos nosotros solos con gente mayor, y disparaban a mansalva. Me llama mucho la atención que la dirigencia política siga escondida y no salga a poner la cara para apoyar a los jubilados”, apuntó.
“Es una vergüenza lo que está pasando en la Argentina. Lo que hicieron Patricia Bullrich y el gobierno, reprimiendo a gente que vive de un sueldo de 250.000 pesos. Es una locura lo que está pasando”, finalizó.
