Un joven de 20 años fue víctima de un asalto en la madrugada del jueves, donde recibió dos disparos. Se encuentra fuera de peligro.
El ataque se produjo alrededor de las 4:20 de la mañana, en la intersección de Arengreen y Manzanares, cuando los delincuentes intentaron robarle el celular.
La víctima se resisitió tras el cruce con los delincuentes, lo que derivó en que le dispararan.
El joven vecino se dirigía a tomar el colectivo para ir a su trabajo en un lavadero de autos en Temperley cuando fue interceptado por dos delincuentes en moto, por la zona del kilómetro 41 de la Ruta 3.
En línea con el relato de su hermana Gisella, los asaltantes amenazaron al joven diciéndole “no corras que te vuelo”.
Sin embargo, la víctima decidió enfrentar al ladrón que se había bajado de la moto. De esta manera, el delincuente abrió fuego contra él.
Así, recibió un disparo en la pierna izquierda y en el rostro. Una de las balas entró y salió sin comprometer órganos vitales, mientras que el disparo en la cara solo lo rozó.
Tras el ataque, los agresores huyeron en la moto, dejando a la víctima herida en el suelo.
Nadie acudió en su ayuda hasta que una pareja que lo conocía pasó por el lugar y lo trasladó a la Unidad de Pronta Atención (UPA) del kilómetro 37. Allí, recibió las primeras atenciones médicas.
Sobre las heridas, Gisella relató que su hermano “seguía perdiendo mucha sangre por la pierna”, lo que la llevó a tomar la decisión de trasladarlo por sus propios medios a un hospital.
Según el relato de la familiar, lo llevó en un colectivo de la línea 620 hasta González Catán, desde donde tomaron un remís hasta el hospital.
Una vez allí, recibió las curaciones y se le realizaron las radiografías correspondientes. Además, lo suturaron las heridas. Después de permanecer algunas horas en observación, fue dado de alta.
Tras esto, se dirigió a la comisaría distrital Sur 3ra de Virrey del Pino para presentar la denuncia. Actualmente, el joven se encuentra en reposo en la casa de su hermana, donde continúa su recuperación.
